La estancia fue muy agradable, especialmente disfrutando de las amplias habitaciones con vistas al río, que resultaban muy relajantes. La piscina era ideal para descansar después de un largo día explorando la ciudad. Me gustó mucho la calidad del desayuno, que ofrecía una variedad de opciones, incluyendo platos preparados al momento. Aunque el hotel está un poco alejado del centro, las instalaciones son modernas y amplias, lo que compensa el desplazamiento.

La habitación tiene ventanales enormes con vistas preciosas.

habitaciones silenciosas, pasillos largos, diseño moderno

El check-in fue una tortura, lentitud insólita y pagar por adelantado fue una falta de clase. Además, la ubicación es bastante apartada, se siente como un laberinto y sin piscina interior o zona spa. ¡Que alguien revise los precios del parking!!!

El desayuno que sorprende

El hotel es moderno y espacioso, con habitaciones cómodas y un desayuno variado y fresco. La atención del personal fue excelente, siempre amable y servicial. Definitivamente un lugar para relajarse y disfrutar.

Sin embargo, está un poco alejado del centro, lo que puede ser un inconveniente. Además, la piscina necesita más tumbonas, ya que a veces hay que conformarse con toallas en el suelo.

Las habitaciones son amplias y luminosas, con vistas al río y un gran diseño. Perfecto para relajarse en la piscina.

Lo viví como una verdadera escapada, no tengo ninguna queja.

Las vistas desde la habitación eran impresionantes, especialmente con los ventanales enormes que dan al río.

El plato de la ducha resultaba incómodo y había algunas manchas en las siliconas.

excelente acceso a monumentos y zonas verdes en zaragoza

me alojé en una habitación muy amplia y cómoda con vistas al río, y me encantó que pudimos disfrutar de la piscina en un ambiente relajante y moderno, haciendo nuestras caminatas más agradables gracias a la cercanía de lugares como el Palacio de la Aljafería y los parques cercanos.

Las habitaciones son amplias, luminosas y tienen un diseño moderno que me encantó. Disfruté de un desayuno espectacular, con un show cooking que hacía tortitas y huevos al momento. La zona de la piscina es muy agradable para relajarse después de un día explorando Zaragoza. Las vistas desde la habitación eran impresionantes, especialmente al atardecer.

La ubicación está algo alejada del centro, y el acceso podría ser complicado para algunos. noté que faltaban tumbonas en la piscina, lo que hizo difícil encontrar un lugar para descansar.

Me alojé en el Hiberus y la experiencia fue bastante buena. Las vistas desde la habitación son impresionantes, especialmente al atardecer. La piscina es ideal para relajarse tras un día en Zaragoza, aunque pude notar que faltaban tumbonas para todos. Sin embargo, disfruté de un sabroso desayuno con calidad de productos locales. ¡Sin duda un hotel al que regresar!

Las ventanas grandes de la habitación ofrecen vistas impresionantes. No hay tantas tumbonas en la piscina, lo que puede ser un problema. Disfruté del alquiler de bicicletas para pasear por la zona.

La experiencia fue genial, especialmente disfrutando de las amplias habitaciones y de la fantástica bañera junto a un ventanal enorme. Durante mi estancia, aproveché para relajarme en la piscina y tomar el sol en la terraza. Aunque a veces había un poco de ruido en el pasillo, eso no arruinó en absoluto lo bien que me sentí. ¡Recomiendo probar el desayuno, bastante variado! ☀️

recomiendo este hotel, es total for unas vacaciones,

Amplia habitación, amable personal, disfruté de la comodidad de un buen desayuno con opciones variadas y un ambiente acogedor que hizo de mi estancia una experiencia agradable.

Todo ha sido perfecto

La habitación tenía unas vistas increíbles, con ventanales enormes que daban al río. La cama era gigante y súper cómoda, lo cual fue un gran punto a favor. Aunque el diseño era moderno, algo en la decoración general del espacio se sentía un poco vacío. El baño también era amplio, pero tuvimos algunos problemas con la limpieza al llegar, ya que vimos algunas manchas en la moqueta. ¡Una pena porque el lugar tiene mucho potencial!

Disfruté de un desayuno con distintas opciones, incluyendo una parte donde preparan platos al momento. Las grandes ventanas de la habitación daban buena luz, y el ambiente era acogedor. La atención en recepción fue buena, lo cual se agradece. Me encantó salir a caminar por la zona, cerca del río, y hacer mis recorridos, como buen andaluz.

La ubicación es un poco apartada del centro, lo cual puede ser un inconveniente para algunos. Algunas áreas del hotel podrían beneficiarse de modernización.

Hiberus es una excelente elección para aquellos que buscan comodidad en Zaragoza. Las habitaciones son amplias y muchas ofrecen una vista magnífica de la ciudad. Disfruté de un desayuno muy variado, con opciones que satisfacen todos los gustos. Además, el hotel tiene un ambiente moderno y cuenta con una piscina en un área amplia, ideal para relajarse después de un día de trabajo. El personal en la recepción fue profesional y muy servicial.

La conexión wifi en la habitación fue lenta.